miércoles, 17 de diciembre de 2008

Daniel...

Hoy... quería simplemente presumirles mi premio como Mejor Ejecutivo Empresarial de la Regional Occidente... sin embargo, mejor les voy a contar la historia de un pequeño... un jovencito que empezaba a vivir... y que era estimado por mucho...

Daniel es un vecinito... hijo de padres actualmente divorciados... muchachito güerito, simpático, acomedido, agradable, educado... que vivía con su mamá en un departamento... su papá lo visitaba y llevaba una magnífica relación con él...

Me tocó convivir pocas cosas con él, pero algunas muy padres: lo veía jugar futbol... y mi hijo el mayor, era su ídolo... por la similitud de edades, mi hija de 15 se hizo muy amigo de él... aunque Dany era un par de años menor...

Recuerdo cuando Andrés Guardado, el jugador del atlas... jugó su partido de despedida, antes de irse a España... Daniel fue balonero de ese partido y estuvo muy cerca de sus ídolos (incluido el propio Guardado), pues le iba al Atlas... recuerdo plenamente cuando regresábamos del partido, Daniel venía verdaderamente emocionado...

Siempre que me veía, me saludaba... y se notaba cariño en su saludo...

Hace unos meses, mi hija me avisó tristemente... que Daniel tenía un problema... un serio problema de diabetes infantil...

Hoy, hace unos minutos... mi hija, llena de tristeza y de dolor... nuevamente me da otra noticia: Daniel sufrió un infarto... y falleció la tarde de hoy... por causa de la maldita enfermedad...

Hoy, no puedo describir mi dolor y mi tristeza, por ver como una vida, que se supone tenía todo por delante... se termina por algo que acaba siendo inexplicable... incongruente... insoportable... interminable...

No dejo de pensar en su mamá... en el dolor... en la tristeza... en todo lo que debe estar pasando... y no solo eso, lo que le falta... cuando ya no tenga a Dany cerquita de ella... cuando ya no lo vea levantarse para irse a la escuela... cuando no lo vea llegar... o hacer su tarea... o irse a jugar futbol... o acostarlo a dormir...

Quienes somos padres, sabemos que no debe haber un dolor más insoportable... que perder un hijo... algo que no se le desea ni al peor enemigo!!!...

Dany... ya dejaste de sufrir los embates de tan terrible enfermedad... finalmente, Diosito te liberó de tanto sufrimiento... ahora, que seguramente estás cerca de Él, pídele para que ayude a tu mami, a tener la fuerza suficiente para soportar el dolor de haberte perdido...


Premios???... reconocimientos???... ascensos???... acaban de perder importancia... y acabo de recibir una gran lección...


Danielito... te queremos mucho... y te vamos a extrañar...




3 comentarios:

  1. Si esta bastante cabron ver como se va un buen muchacho, y ni que decir de los padres que quedan con uno de los dolores mas grandes que debe haber en esta tierra.

    Animo para ellos.

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  2. Xhabyra... Polvo...

    Así es... cuánto dolor... cuánta tristeza para todos, especialmente para los padres... cuando sucede algo así...

    Que Dios nos libre... de verdad...

    Un abrazo... gracias por sus palabras...

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